Si eres un apasionado de los vehículos antiguos y restaurados, te encantará conocer la historia de LK 140, un camión emblemático que se ganó el corazón de Neo, empresario y dueño de Neoplastic. Este camión, matriculado originalmente en 1977, fue rescatado del abandono y transformado en una verdadera obra de arte automotriz. Exploremos cada detalle de este viaje de restauración, que implicó dedicación, pasión y mucha creatividad.
La historia del LK 140
La historia de LK 140 comienza en 1977, cuando quedó registrado como kilómetro cero. En aquella época, el camión era un símbolo de robustez y prestaciones, equipado con el motor Turbocompresor DS14 V8, capaz de entregar 350 CV. Funcionó incansablemente durante décadas hasta que quedó de lado, sufriendo los efectos del tiempo y el abandono.
fue en 2010 que Neo, apasionado de los vehículos antiguos, descubrió el camión a la venta en Curitiba, Paraná. Junto a Joaquim Pedro da Cruz, conocido como Goteo, conductor de confianza y empleado de Neoplastic desde hace más de 23 años, Neo rescató el vehículo y comenzó un ambicioso proyecto de restauración. El objetivo era devolver la camioneta a su gloria original, pero con un toque personalizado que la hiciera destacar aún más.
El proceso de restauración
la restauración de LK 140 Fue un viaje que tomó cuatro años e involucró a un equipo de ocho expertos, incluidos hojalateros, pintores y mecánicos. A pesar de estar en buen estado, algunos componentes fundamentales, como el motor, la caja de cambios y el diferencial, necesitaron una revisión completa para garantizar un rendimiento óptimo.
Personalización de Chrome
Una de las grandes diferencias de este proyecto fue la decisión de personalizar piezas cromadas. Neo no se conformó con las piezas estándar disponibles en el mercado. Optó por fabricar las piezas internamente, utilizando moldes de los originales y transformándolos en acero cromado. Entre las piezas personalizadas se encuentran:
- Rejillas Es pasos de acceso a la cabina;
- Acabados exteriores, incluidas luces y tanques de combustible.
Tú tanques originalesLos modelos cuadrados, que eran cuadrados, fueron sustituidos por modelos cilíndricos cromados, dando un aspecto más elegante. Hasta quinta rueda, capaz de detenerse hasta 32 toneladas, ha sido reposicionado para mejorar la funcionalidad y el diseño.
Interior conservado
Si bien el exterior ha sido completamente transformado, el interior del LK 140 mantuvo su esencia original. Tapiceros especializados se encargaron de los bancos con suspensión neumática, preservando la comodidad y el aspecto de la época. El resultado es un equilibrio perfecto entre nostalgia Es modernidad.
El camión hoy
Después de la restauración, el LK 140 Se ha convertido en una obra maestra en los eventos de vehículos antiguos. Con 268 mil kilómetros recorridos, el camión ya no circula por las carreteras como transporte pesado, sino como protagonista de exposiciones y reuniones. Atrae miradas de admiración allá donde va, demostrando que su dedicación a la restauración valió cada centavo y esfuerzo.
Hoy, el camión parte de la impresionante colección personal de Neo, que incluye 80 vehículos restaurados, incluidos camiones, autobuses y automóviles. Cada modelo es un testimonio vivo de la pasión y el compromiso de Neo por preservar la historia del automóvil.
Una inversión de pasión
Restaurar el LK 140 No fue sólo un desafío técnico, sino también una inversión importante. Se estima que el coste total de la restauración superó R$ 300 mil, considerando piezas personalizadas, cromados y mano de obra especializada. Sin embargo, para Neo el valor es secundario al resultado final.
Si eres fanático de los vehículos antiguos, seguramente comprenderás lo que es invertir tiempo y dinero en algo que tiene tanto valor sentimental e histórico. EL LK 140 no es sólo un camión; es un símbolo de cómo la pasión puede transformar máquinas olvidadas en verdaderas joyas sobre ruedas.
Conclusión
En 2025, historias como la de LK 140 seguir inspirando a los apasionados de la restauración y personalización de vehículos. Esta camioneta no es sólo un ejemplo de dedicación y artesanía, sino también una lección sobre cómo preservar la historia del automóvil puede dar nueva vida a clásicos olvidados.
Si quieres explorar el mundo de la restauración o simplemente dejarte encantar por historias como esta, el LK 140 Es un recordatorio de que cada vehículo tiene una historia que contar y que con esfuerzo y pasión es posible crear algo verdaderamente único.
Así que la próxima vez que veas una camioneta clásica en un evento, recuerda: detrás de ese brillo cromado impecable, hay una historia tan fascinante como el vehículo mismo. ¿Qué tal iniciar tu propio proyecto? Después de todo, la pasión por los motores nunca pasa de moda.