Tiburón: el deportivo brasileño que se hundió en el pasado

Brasil siempre ha jugado un papel destacado en la creatividad automotriz, ya sea a través de la creación de modelos únicos o de la adaptación de diseños importados.

Sin embargo, no todas las innovaciones terminan en éxito, y la Tiburón, un deportivo producido por Trivellato SA, es un ejemplo clásico de cómo la ambición puede verse sofocada por problemas legales, técnicos y de marketing.

Lanzado a finales de los años 1960, el Tiburón Tenía todo para convertirse en un ícono brasileño.

Con una carrocería fabricada en plástico reforzado con fibra de vidrio, el modelo era ligero, moderno y utilizaba una de las mecánicas más confiables de la época: la de los Volkswagen con motor de aire.

Estos motores, con variaciones de 1.200 cm³ a 1.600 cm³, ya equipaban una amplia gama de vehículos en Brasil, como los clásicos Karmann-Ghia, tú Escarabajos e incluso el Puma GT.

Además, la base Karmann-Ghia se podía utilizar para montar el Shark, lo que aumentaba su atractivo para los entusiastas.

El diseño del Shark llamó la atención por su clara inspiración en el legendario Ford GT-40, un coche de carreras que había alcanzado fama mundial en las 24 Horas de Le Mans.

Escribe sobre Tiburón en 2025 Es un viaje en el tiempo que nos recuerda lo efímero de algunas ideas y la importancia de innovar auténticamente.

Hoy, Shark es un ejemplo de cómo la pasión por la ingeniería puede afrontar grandes desafíos, pero también de cómo la historia siempre encuentra un lugar para preservar estos momentos.